El amor a distancia es un tema que a muchas parejas les cuesta un poco de esfuerzo, pero para otras, se les hace imposible. La distancia y el amor son dos términos que nunca irán de la mano.
Cuando se comienza una relación con alguien, siempre existe una necesidad física de estar junto a esa persona, de sentirla, de tocarla y abrazarla durante el día. Sin embargo, cuando uno de los dos decide mudarse por aspiraciones laborales o motivos personales, la relación se destina a cambiar, a adaptarse a las nuevas condiciones o simplemente, terminar. Solo se debe recordar a nuestros antepasados, quienes por largos días esperaban una carta de aquel ser amado. Entonces ¿Tienen éxito las relaciones a distancia?
De cierta forma es normal que alguna de las partes se vea obligada a cambiar de residencia por motivos laborales, académicos o personales. Sin embargo, debe existir una fecha de retorno para que la pareja vuelva a estar junta y se reencuentre pasado este período. De esta manera, se puede salvar la relación y recuperar el tiempo perdido.
Por otra parte, si la partida es definitiva, la pareja no tendrá mucho futuro. La única manera de retomar la relación, es que la pareja se vaya a vivir junta y comience una nueva vida en otro lugar. Pero si ambas personas viven separadas, de alguna manera el amor se terminará tarde o temprano.
Como primer consejo, al tomar la decisión de seguir la relación a pesar de la distancia, se debe aceptar la situación. Lo más recomendable es comenzar a dedicarse tiempo, conocer otras personas y socializar o retomar aquellos hobbies que por alguna razón u otra no se podían realizar junto con la pareja.
De esta manera, se evita la conversión en una persona emocionalmente dependiente y cuando esa persona regrese se podrá disfrutar de la relación de una manera más sana e intensa. Lo primordial es tener paciencia y moldearse lo más pronto a la nueva situación.
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